Leon Borensztein: American Portraits

by juan

© Leon Borensztein

 
Leon Borensztein, polaco de nacimiento, emigró a Estados Unidos en los años 70. Se estableció en California, y mientras estudiaba fotografía en San Francisco empezó a trabajar como retratista ambulante. Viajando con su equipo básico de iluminación visitó multitud de hogares, la mayoría de ellos de clase media y baja, para realizar retratos por encargo de parejas, niños, adultos o familias enteras.

© Leon Borensztein

 
Borensztein realizaba todo su trabajo comercial en color, cumpliendo con los estándares de mercado. Pero además de las imágenes realizadas para sus clientes, a continuación les pedía que posaran de nuevo para él. Fotografiando en blanco y negro, a menudo alejaba la cámara dejando al descubierto el lugar físico en el que tenían lugar las sesiones, o incluía a terceras personas que observaban a sus familiares posar. Poco a poco fue produciendo una apasionante obra personal, con rotundos retratos de aparente sencillez pero que conforman un complejo y valioso retrato de un lugar y una época.

© Leon Borensztein

 
A pesar del reconocimiento que obtuvo su trabajo en los años 80 -en 1987 recibe la beca Guggenheim junto a nada menos que Philip-Lorca diCorcia o Sally Mann-, Borensztein fue uno de tantos fotógrafos que con los años van desapareciendo bajo el constante flujo de nombres. Por suerte -y aquí llega el final feliz de la historia-, el gran Todd Hido se puso manos a la obra para ayudar a redescubrir su obra dos décadas después. Editó, secuenció y finalmente consiguió que se publicara “American Portraits” (Nazraeli Press, 2011), que fue incluido en varias de las listas más influyentes como uno de los mejores libros fotográficos de 2012.